Cada mes Septiembre, llega la enfermedad de moda, “El síndrome postvacacional”,
“El síndrome postvacacional”, enfermedad promovida por los medios de comunicación. Sus síntomas: ansiedad, estrés, cambios en los estados de ánimo, depresión y nostalgia. Todos relacionados con la vuelta al trabajo.
El verano 2014, termina con 4.427.930 parados, que salvo por solidaridad familiar, no tienen vacaciones a los que hay que sumar el 23 % ocupados (3.829.389) que tampoco las disfrutaran, pese a tener trabajo, la precariedad laboral, los sueldos bajos, miedo a despidos y ganar dinero extra para poder pagar deudas, les dejara en casa todo el verano.
¡Alegraros…! unos 8 millones de españoles y sus familias no tienen vacaciones así que no sufrirán el: “terrible síndrome postvacacional”
Hablando en serio, padecer la citada depresión después haber podido disfrutar de un periodo de descanso laboral puede parecer un acto de egoísmo insolidario, deberíamos alegrarnos de poder contar con vacaciones, ¿Y con trabajo?
Mucho tienen que cambiar las cosas para que la mayoría de los ciudadanos, podamos tener trabajo, y gracias a ello vacaciones, hay que mirar más allá, empezar a pensar como sociedad, sufrir por los problemas que nos afectan a todos y todas.
La crisis es el enemigo de todos, no bajemos la guardia con lo superficial, empecemos a ser solidarios en lo practico, exijamos cambios a políticos y empresarios, como sociedad.
Mucho tienen que cambiar las cosas para que la mayoría de los ciudadanos, podamos tener trabajo, y gracias a ello vacaciones, hay que mirar más allá, empezar a pensar como sociedad, sufrir por los problemas que nos afectan a todos y todas.
La crisis es el enemigo de todos, no bajemos la guardia con lo superficial, empecemos a ser solidarios en lo practico, exijamos cambios a políticos y empresarios, como sociedad.
Según la Sociedad Española de Psiquiatría, “El síndrome postvacacional no existe” no se puede considerarse una enfermedad definida. Los síntomas que se relatan corresponden a un estado emocional normal en cualquier circunstancia que requiera adaptación a un cambio, la irritabilidad, el insomnio y la ansiedad que se manifiestan tras volver al trabajo después del verano se corresponden con un estado de ánimo pasajero y breve más o menos negativo, y no se puede comparar con una enfermedad como la depresión, que sufren 6 millones de españoles y es la segunda causa de baja laboral.
Visto lo visto, yo borraría lo del síndrome postvacacional, y acuñaría dos síndromes nuevos; “Síndrome NO-vacacional” y el más grave, “Síndrome NO laboral” este ultimo afecta a más de 4 millones de personas en España, y sus consecuencias son dramáticas para todos…
…la próxima vez que el locutor del noticiario diga lo del síndrome postvacacional, cambio de cadena… “lo juro”
…y mejor que no me lo mencione nadie le trabajo….
“tonterías las justas”
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Malestar, ansiedad, depresión, fatiga, disminución del rendimiento, palpitaciones, sudoración, aumento de la frecuencia respiratoria y cardíaca, temblores, cambios de humor… Éstos son algunos de los síntomas que llegan a sufrir los afectados por este sindrome post vacacion. Pero no sé yo hasta que punto es verdad o exageración un poco por parte de algunos no?
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